Ao Thalane

Lejos del ajetreo de los grandes centros turísticos, la bahía de Ao Thalane te invita a disfrutar de sus bosques de manglares preservados, impresionantes picos de piedra caliza y pequeñas playas desiertas.

Descubriendo Ao Thalane

En el sur de Tailandia, Ao Thalane te espera para una experiencia relajante e inolvidable. En el corazón de esta pequeña bahía, las aguas turquesas del mar de Andamán, los manglares y los acantilados de caliza invitan a la aventura. Estos lugares tranquilos son paradas muy esperadas durante las excursiones en kayak que hacen famosa a la región.

Ao Thalane está a un corto trayecto desde Krabi, a unos 40 km de distancia. Puedes dedicarle una excursión de medio día o un día completo, según tus preferencias.

Disfruta del kayak en un escenario tropical impresionante

El kayak es la mejor manera de explorar la belleza de Ao Thalane. Toma un remo y navega suavemente bajo la frondosa vegetación. Los manglares forman un laberinto salvaje que te desconecta completamente y te conecta con la naturaleza. El paisaje es aún más cautivador durante la marea baja, cuando las raíces emergen sobre el agua. En el interior, los manglares dan paso a una jungla exuberante.

Mantente atento a la fauna local durante tu recorrido. Garzas y martines pescadores vuelan sobre ti, mientras que los macacos y otros monos se deslizan hábilmente entre las ramas. Con suerte y paciencia, podrás ver nutrias de río, varanos e incluso serpientes.

El paseo en kayak también te lleva a explorar una serie de cuevas milenarias incrustadas entre los famosos acantilados de caliza que adornan las postales de Krabi. No olvides llevar tu cámara durante esta caminata para capturar estas maravillas naturales.

Al salir de los manglares y los acantilados, te espera otro escenario paradisíaco. La desembocadura del río conduce a playas vírgenes donde puedes relajarte lejos de las multitudes. En el camino de regreso al pueblo de Ao Thalane, encontrarás un banco de arena perfecto para tomar fotos.

Ao Thalane, un destino fuera de lo común

A diferencia de la rápida expansión de Krabi, Ao Thalane ha conservado su autenticidad y representa perfectamente la belleza tropical de Tailandia. Las tranquilas aguas y los canales llenos de peces y mariscos siempre han sido la principal fuente de vida para la comunidad local, mucho antes de que el turismo se hiciera presente.

Ao Thalane cuenta con algunos hoteles y campamentos de kayak para recibir a los visitantes. Sin embargo, estos establecimientos nunca han buscado el turismo de masas para preservar el ambiente y la intimidad de su paraíso. Su clientela está formada principalmente por pequeños grupos de vacacionistas en busca de tranquilidad y una experiencia más cercana a la naturaleza salvaje. Los operadores locales comprenden el valor y la fragilidad del ecosistema de manglares, y trabajan para minimizar su impacto ambiental mientras educan a los viajeros.

Ao Thalane es naturalmente una opción ideal para los ecoturistas que buscan descubrir auténticamente, preocupados por preservar el medio ambiente y apoyar a las comunidades locales.

Cómo llegar?

Para llegar a Ao Thalane, puedes volar al Aeropuerto Internacional de Krabi, ubicado a unos 40 km al este. Desde allí, tienes varias opciones para llegar a la bahía. Además de los traslados privados organizados por los hoteles, puedes tomar un taxi o alquilar un coche. Desde la estación balnearia de Ao Nang, también puedes tomar un taxi acuático y navegar a lo largo de la costa hasta Ao Thalane. Tanto por tierra como por mar, los viajes ofrecen un adelanto de las bellezas naturales que te esperan en la bahía, así que no dudes en disfrutarlos al máximo.

¿Cuándo venir?

La mejor época para visitar Ao Thalane es durante la temporada seca, que va de noviembre a abril. Prepárate para una mayor afluencia de turistas durante la Navidad y Año Nuevo. En general, la marea media es el momento más favorable para las excursiones en kayak en la bahía, ya que podrás explorar más áreas. Durante la marea baja, las cuevas son más accesibles y tendrás mejores oportunidades de observar la fauna que se reúne a lo largo de las orillas fangosas.